En México, actualmente existe una fuerte preocupación social entre políticos, académicos y organizaciones sociales por la existencia de un alto porcentaje de jóvenes que no se encuentran ni estudiando ni trabajando (conocidos como nini). La polémica gira en torno a cuántos son, sus causas y las estrategias para reducirlos (Székely, 2011; Tuirán, 2011). Se piensa que la población nini atenta contra la cohesión social y el desarrollo social y económico del país y que, por lo tanto, es necesario reducirla con políticas preventivas y acciones, que permitan la inserción de esta población en la escuela o el trabajo y frenen las consecuencias negativas de la inactividad de los jóvenes.
Relación del insumo con el Banco del Conocimiento