Corporativa
Las organizaciones se desarrollan en la actualidad en un entorno de mayor competencia que les exige crecer, innovar, ser más eficientes y competitivas si quieren permanecer en el mercado. La estrategia corporativa permite tener claridad acerca de dónde está ubicada la empresa y lo más importante a dónde quiere llegar, lo que exige a los niveles de mando una responsabilidad importante al contribuir en la definición del rumbo y destino de la empresa.
El éxito de las organizaciones se mide en términos del cumplimiento de los objetivos planteados, los cuales se establecen en un Mapa Estratégico que consiste en una representación gráfica, sencilla y coherente del rumbo de la empresa, se conforma de cuatro perspectivas organizacionales: financiera, clientes, procesos internos y aprendizaje e inicia con la definición de la visión, misión y valores empresariales.
Alinear los objetivos de las cuatro perspectivas organizacionales y describir con claridad la relación de causa-efecto que existe entre ellas, es la clave de la creación de valor, el Balanced Scorecard (BSC). Es una herramienta de planeación que define la secuencia de cómo la organización va a lograr los objetivos financieros y de satisfacción de los clientes a través del buen desempeño de los procesos internos y de la habilitación del capital humano, organizacional y tecnológico.
Para garantizar la implementación de la estrategia es preciso asociar a cada una de las perspectivas organizacionales, proyectos de mejora concretos que faciliten su manejo, niveles de respuesta y actuación. Un proyecto es un esfuerzo temporal que se realiza para crear un único producto, servicio o resultado y que es elaborado progresivamente. Esto significa que tiene un comienzo y un final definidos e involucra tecnología, procesos, roles, responsabilidades y niveles de autoridad.
La creación de valor para todos aquellos implicados en el funcionamiento de la empresa es fundamental, las compañías reconocen que para ser efectivas y lograr los objetivos planteados en la estrategia se requiere establecer una adecuada relación con los diferentes grupos de interés empresarial (stakeholders). El término describe a aquellas personas o grupos de personas que se ven afectados por las operaciones de una organización o empresa. Para identificar a los stakeholders se requiere un análisis de diferentes dimensiones como son: su responsabilidad, nivel de influencia, cercanía, dependencia, etc. Complacer a los stakeholders significa establecer mecanismos de comunicación directa que faciliten el desarrollo sustentable de la organización.
Cuando las organizaciones establecen su planeación estratégica debe contemplar el impacto que su operación generará de manera integral y hacerse responsables de su entorno. Las empresas juegan un rol más dinámico que antes. Sus actividades tienen un alcance económico, ambiental y social en escala local y global. La Responsabilidad Social es una actitud madura, consiente y sensible hacia los problemas de nuestra sociedad. Implica una conducta proactiva que se refleja en hábitos, estrategias y procesos que ayudan a minimizar los impactos negativos que se generan en el medio ambiente y en la sociedad. Consiste en crear conciencia de que cada persona forma parte de una sociedad que crea compromisos y obligaciones que se deben cumplir, tanto en lo individual (responsabilidad social individual) como en conjunto (responsabilidad social empresarial, gubernamental, institucional, u organizacional).
El éxito de las organizaciones se mide en términos del cumplimiento de los objetivos planteados, los cuales se establecen en un Mapa Estratégico que consiste en una representación gráfica, sencilla y coherente del rumbo de la empresa, se conforma de cuatro perspectivas organizacionales: financiera, clientes, procesos internos y aprendizaje e inicia con la definición de la visión, misión y valores empresariales.
Alinear los objetivos de las cuatro perspectivas organizacionales y describir con claridad la relación de causa-efecto que existe entre ellas, es la clave de la creación de valor, el Balanced Scorecard (BSC). Es una herramienta de planeación que define la secuencia de cómo la organización va a lograr los objetivos financieros y de satisfacción de los clientes a través del buen desempeño de los procesos internos y de la habilitación del capital humano, organizacional y tecnológico.
Para garantizar la implementación de la estrategia es preciso asociar a cada una de las perspectivas organizacionales, proyectos de mejora concretos que faciliten su manejo, niveles de respuesta y actuación. Un proyecto es un esfuerzo temporal que se realiza para crear un único producto, servicio o resultado y que es elaborado progresivamente. Esto significa que tiene un comienzo y un final definidos e involucra tecnología, procesos, roles, responsabilidades y niveles de autoridad.
La creación de valor para todos aquellos implicados en el funcionamiento de la empresa es fundamental, las compañías reconocen que para ser efectivas y lograr los objetivos planteados en la estrategia se requiere establecer una adecuada relación con los diferentes grupos de interés empresarial (stakeholders). El término describe a aquellas personas o grupos de personas que se ven afectados por las operaciones de una organización o empresa. Para identificar a los stakeholders se requiere un análisis de diferentes dimensiones como son: su responsabilidad, nivel de influencia, cercanía, dependencia, etc. Complacer a los stakeholders significa establecer mecanismos de comunicación directa que faciliten el desarrollo sustentable de la organización.
Cuando las organizaciones establecen su planeación estratégica debe contemplar el impacto que su operación generará de manera integral y hacerse responsables de su entorno. Las empresas juegan un rol más dinámico que antes. Sus actividades tienen un alcance económico, ambiental y social en escala local y global. La Responsabilidad Social es una actitud madura, consiente y sensible hacia los problemas de nuestra sociedad. Implica una conducta proactiva que se refleja en hábitos, estrategias y procesos que ayudan a minimizar los impactos negativos que se generan en el medio ambiente y en la sociedad. Consiste en crear conciencia de que cada persona forma parte de una sociedad que crea compromisos y obligaciones que se deben cumplir, tanto en lo individual (responsabilidad social individual) como en conjunto (responsabilidad social empresarial, gubernamental, institucional, u organizacional).